Un plato que representa fielmente la esencia de la gastronomía ecuatoriana, especialmente de la región costa. La zarandaja, una leguminosa tradicional y rica en sabor, es la protagonista de esta menestra espesa y bien sazonada, cocinada lentamente con cebolla, ajo, achiote y otras especias que realzan su sabor natural. Es un guiso que sabe a hogar, a tradición y a buenos recuerdos.

El arroz blanco, bien cocido y graneado, sirve como base perfecta para absorber los jugos de la menestra y equilibrar la intensidad de sabores. Y para completar esta delicia, una generosa porción de carne asada, marinada con hierbas y especias criollas, cocinada a la parrilla o a la plancha hasta lograr ese punto jugoso y lleno de carácter.

Este plato es más que una comida: es parte de la identidad ecuatoriana, una combinación nutritiva, contundente y llena de historia. A menudo se acompaña con maduros fritos, curtido criollo o un toque de ají casero, haciendo de cada bocado una experiencia rica en sabor y tradición.

Perfecto para un almuerzo lleno de energía o para quienes desean probar lo mejor de nuestra cocina típica en un solo plato.